El microesmerilado o piel de melocotón, da ligereza al tejido, pues disminuye la superficie de contacto con la piel y evita el rozamiento. Se puede realizar en una o dos caras del tejido, esto determinado por el tipo de rendimiento buscado.
Este acabado no está limitado sólo a tejidos de invierno, sino que también puede mejorar la sensación de confort en los tejidos ligeros para temporadas cálidas.
La tecnología innovadora del microesmerilado con la que contamos, permite regular fácilmente el aspecto del acabado para sacar el máximo provecho de los artículos en función del uso de la prenda.